Pues sí, el año ha dado una vuelta completa y ya hemos llegado a septiembre otra vez, por lo que mi chiquitín (ya no tanto) ha cumplido su primer año de vida, momento muy emocionante, porque está muy guapo, muy simpático, porque he superado mis expectativas de que tal madre iba a ser y como iba a llevarlo, y puedo decir que estoy encantada y que no lo cambio por nada.
También nos espera el reto de este año, en el que va a caminar con soltura, caerse y por supuesto levantarse, estoy deseando oírle hablar y saber que piensa y que sus abrazos los acompañe de un te quiero mamá.
La celebración fue estupenda, mi deseo es que siga creciendo feliz y rodeado de cariño como hasta ahora, ojala pudiera protegerlo de todo y de todos.
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