Lo primero dejar bien claro que tener miedo ante, durante y después de un embarazo es lo más normal del mundo.
Parece que está mal visto reconocerlo o decirlo en alto porque somos super mujeres totalmente preparadas para afrontar cualquier situación y la maternidad con más motivo, no nos permitimos dudar ni titubear, no vaya a ser que nos tachen de irresponcables, malas madres o a saber que más... Pues a la mierda con todo eso.
Soy mujer, soy adulta, estoy embarazada y tengo miedos y dudas.
- El miedo a lo desconocido
- A no saber qué hacer
- A que algo no esté bien
- A que a mi pequeño al que no conozco pero al que ya quiero tanto le ocurra algo
- A no saber compatibilizar mi nuevo papale de madre con el de mujer, persona y pareja
- A no poder con todo
- A verme superada
- Saber llegar al equilibrio de que mi hijo no pase necesidad pero tampoco sea un maldito carpichoso
- A verme superada por esos parientes pesados que siempre se creen que lo saben todo
- Al parto, sin duda, un gran miedo: A no poder soportarlo, a que sea muy largo, a tardar mucho en recuperar etc............
por suerte para mi, a pesar de que todo lo relacionado con mi hijo me crea dudas, sigo siendo yo y paso radicalmente de toda aquella persona, de dudosa buena voluntad, que viene dando consejos inútiles, diciéndote lo duro que es, lo poco que vas a dormir. Yo lo que pienso en algunos casos es si tú pudiste yo también.
Así que no os sintaís malas personas si flaqueas, si tienes, dudas, miedos e inseguridades, vas a ser madre y vas a tener la voluntad de hacer todo lo mejor para la personita que ha salido de ti, así que calma. Sobretodo no te agobies porque lo nota, si tú no confias en ti misma él tampoco lo hará así que vamos a demostrarle que los dos juntos podemos, al fin y al cabo los dos somos nuevos en el papel de madre e hijo.